lunes, 22 de enero de 2018

A propósito de Venezuela se escribe con V mayúscula...

El martes 16 junto a otros más decidí ser parte de ese montón que está dejando atrás este territorio que tanto amamos y al parecer quiere seguir teñido de rojo.
Después de lagrimas y abrazos entre familiares caminé hacia el puesto asignado en uno de las famosas líneas de nuestro país Expreso Los Llanos, ustedes ya sabrán el porqué, tocan la ventana y veo los lagrimones de mi madre que para quién la conoce muy bien sabe de sus sentimientos de nostalgia, imagen que retumbaba en mi mente frecuentemente una vez el chófer pusiera sus pies en las cholas del bus.
Pasamos muchas alcabalas, y digo pasamos porque en el viaje veníamos mi esposo, uno de mis hermanos (gracias a Dios el otro ya emigró), su novia, un tío de mi sobrina, dos tías maternas, dos primas maternas y un primito segundo, ¿por qué tanta gente?, porque los familiares maternos movieron cielo y tierra para conseguir efectivo (los que estamos en el país saben lo peluo que es esto) y traslado desde Calabozo, Edo. Guárico y Maracay Edo. Aragua para celebrar conmigo mi matrimonio eclesiástico el día 13 (fue sábado no martes), estuvo bien luego contaré algo de ésto...
Ajá pasamos muchas alcabalas y vi que al menos un bus estaba parado con los pasajeros abajo revisando maletas, nosotros seguíamos pa'lante.
Saben? uno no duerme bien pero cierra los ojos como para que el viaje se haga más rápido cuando de pronto escuchamos unos sonidos muy raros, en general pensamos que era el bus cuando nos asomamos por la ventana y a voz populi decimos ¡NOS ESTÁN LANZANDO PIEDRAS! Claramente recuerdo una sombra haciendo los movimientos de lanzamiento y a su vez a coro ¡CIERREN LAS CORTINAS, CIERREN LAS CORTINAS! (me están temblando las piernas en este momento), miré al frente y habían unos negritos, como tres, montados en el bus estaban como negociando cuando en menos de un segundo abrieron la puerta de un empujón y antes de verlos propiamente a ellos vi como tres tipos de armas, les mentiría si les digo sus primeras palabras porque no las recuerdo solo sé que empezaron a pedir de todo a los pasajeros de adelante, fe (Felix, mi esposo) intentó esconder una billetera con algunos de los $ que llevábamos y uno de los negritos lo pilló y nos abordó ¿qué estas? escondiendo?, ¿te vas a poner comiquita?, él de los nervios negaba que teníamos otro teléfono pero yo que ya había sido víctima del hampa en 6 oportunidades sabía que todo podía empeorar decidí buscarlo, sin embargo los nervios me atacaron de otra forma y todo lo hacía más lento de lo normal, me pusieron una pajiza (así le dicen) en la frente mientras me amenazaban con dispararme, a fe le dieron dos golpes en la cabeza por dársela de comiquita y creer que el negro era marico (suposiciones del choro), insistimos en una hamaquita porque era uno de nuestros escondites de $ y el negro dijo "yo vivo en el monte, esto me sirve pa' dormí) cuando el choro me dice "tranquila mami ahorita tú y yo arreglamos eso" cuando escuché esas palabras me imaginé ser violada por él y los 10 y pico de negros choros que estaban en el bus, no insistí más en la hamaca.
Robaron a nuestro grupo, a mí hermano le mandaron a quitar sus zapatos para ver la marca, una vez "superada" la situación mi hermano dijo me imagino que no se los llevó porque estaban podrios... se llevaron pasaportes, documentos apostillados nuestra comida (pan árabe, diablitos, sandiwches, sambas), porque íbamos a emigrar por carretera, equipaje con ropa para entrevistas, frío, calor, material de trabajo, celulares, en fin como dicen aquí se armaron un limpio.
En todo ese proceso creíamos que el bus estaba detenido, viene uno de esos choros y dice "vamos a soltá la bomba aquí" pensé que era show, luego de todo me dicen que sí, tenían una granada en la mano. Cuando los tipos se bajan empezamos a recoger lo que no se llevaron y para nuestra sorpresa se vuelven a montar apuntándonos "qué estás escondiendo" todo el mundo "nada, nada", "hablen claro", "nada, nada" se vuelve a bajar y empiezo a rezar el padre nuestro mi tía Elisa, una de las que mantuvo más la calma nos dijo no recen que a ellos eso no les gusta, ok, ok, yo: no reces no te muevas, no reces no te muevas, no reces no te muevas" mientras le agarraba fuertemente la mano a fe, escuchaba a mi hermano llorando por sus equipos, a mi otra tía decir "nunca había pasado por una situación como esta" menos mal, mi prima le tapó los ojos a su hijo de 4 años...¡Ah lo olvidaba! el tipo no sabía que los billetes eran $, uno de ellos fue que le dijo sí esos deben ser $ llévatelos, él se adueñó de nosotros....
Llegamos a un caserío, suponemos eran como las 4 am, a los pasajeros de arriba los dejaron sin zapatos, a todos no le quitaron los bolsos pero si otras cosas, dedujimos que los GUARDIAS (de mierda) los que nos revisaron las maletas a unos 300 m antes de la emboscada, fueron los que dieron el pitazo de que veníamos desde Upata porque a unas personas le preguntaban por el oro, y repito GUARDIAS DE MIERDA, ¿Dios me estará leyendo?, no lo sé pero espero me perdone por este pequeño insulto y que haga justicia. A él le debo la vida y esta oportunidad de desahogarme porque estuve muy cerca de morir.
El bus recibió 12 disparos aproximadamente, no todo fueron piedras porque el valiente chófer intentó darle a toda mecha pero el bus venía fallando (típico en ese expreso) entonces le dispararon, 10 balas impactaron el vidrio del chófer, él se salvó por pocos milímetros, solo vidrios rotos le rozaron la cara, al otro lo iban a matar pero tembló tanto y decía que tenía dos hijas de 8 añitos que por favor no le hicieran nada, mi hermano, su novia y tal vez mi prima, se salvaron porque a ese vidrio le dispararon, la bala pegó contra una goma y aún así cuando llegamos a Maracay como a las 5 pm, nuestro destino #1, el vidrio se cayó todo en pedacitos.
La única sangre que vimos fue la del chofer en su cara y fue suficiente para decidir no viajar más en bus, no viajar más de noche...
¿Saben?, nunca imaginé que parte de mi despedida del país sería así, imaginaba lo engorroso del viaje en carretera y las ganas de uno querer bañarse y para aquellos que aún lo dudan pues se los confirmo si asaltan los buses, lo de nosotros fue en Barlovento, ni el CICPC ha podido con esa banda, ah también nos enteramos que eran como 25 negros choros 10 pico en el bus y el resto en la carretera, uno del CICPC dijo esos están protegidos por un exgobernador, uno de los afectados escuchó el apellido Rangel, no sé, no estuve presente en ese momento.
Yo quería ser cursi, graciosa con mi historia de emigrante, pero de lo malo se sacan cosas buenas.

Gracias a Dios y al universo por conspirar.

PD: Tal vez la edite porque es mi borrador.


Karina Flores
Guayanesa
Venezolana
Hija
Hermana
Esposa
Sobrina
Prima
Madrina

Ahijada
Amiga

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